martes, 30 de noviembre de 2010

Final

TP 1 - Lugar







TP 2 - El Otro
http://vimeo.com/17384874

TP3 - La cosa
http://www.youtube.com/watch?v=_xu0BlRFV1Y

TP4- Transposición
http://vimeo.com/15837018

TP5 - Viaje
http://vimeo.com/17459779


En mi última Autoevaluación escrita debo decir que algo que odio hacer y odie durante todo el año es escribir una Autoevaluación. Entiendo el por qué nos hacen escribirla, pero yo lo siento tan interno, que publicarlo en un blog es algo que no me agrada demasiado, Daf se estará agarrando la cabeza, pero bueno tenia que decirlo/escribirlo. Hay un trasfondo pero no creo necesario explicarlo por este medio.

Bueno prefiero escribir sobre un TODO, en vez de ir trabajo por trabajo. A lo largo de todo el año fue muy claro el objetivo de la cursada, capaz los planteos de los trabajos confundían ya que muchas veces en las teóricas nos pedían o nos mostraban algo que luego en el taller cambiaba completamente. Pero gracias a nuestra profesora te das cuenta que no todo tiene que ser tan objetivo, hay miles de cosas que se nos escapan y aprender a entenderlas y mucho mas comprender que hacer con eso, es complicado.

Los trabajos pasaron a ser nuestros dilemas, eran nuestra limitación, eran los momentos en donde uno se planteaba y se contradecía. Nos partían la cabeza, nos daban vueltas y vueltas, hasta que conseguíamos algo y nos amarrábamos fuerte para que no se escape, que con el tiempo nos despertamos, solo hay que “darse cuenta” de lo que tenemos y como poder usarlo, modificarlo, mejorarlo. También el plantearse si eso sirve o solo hay que dejarlo ir y volver a empezar. Esa limitación se convirtió en un simple planteo para que viajemos y diseñemos a partir de esa base.

Las tardes de taller eran eternas, pero cuando te vas acostumbrando solo deseas que lleguen para que todos te ayuden, por suerte caí en un grupo único, no todos comentaban en el momento del taller, pero siempre se acercaban a darte tu opinión, y eso valoro muchísimo. Más cuando uno se siente en el limbo y no sabe para donde correr, todos fueron muy comprensibles y humildes.

Y nuestra santa profesora, Dafne, al comienzo me chocaba muchísimo, pero creo que fue por que empezamos con Gabriel Valanci, que venia con su paciencia eterna, y sus preguntas que te dejaban en la nada, pero a la vez te hacían maquinar a mil por hora. Y luego Dafne, que ya llegaba aturdida al taller, pero tenia sus días, podías encontrarte con la dulce maternal o con la cansada y saturada Daf. Solo puedo decir: GRACIAS A AMBOS, por los golpes, por los referentes (que fueron nuestra salvación), por el reconocimiento, por las preguntas, por la paciencia.

Buen fin de año a todos! Y nos vemos en la Facu.



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